En esta época capitalista, de lucha por el poder constante, donde lo que prima es polarizar a la gente al máximo para atraerla a tu opinión, nos damos de bruces con la polarización más peligrosa que hay en la sociedad, la de géneros.
España no es un país de libre opinión. No se puede decir nada en contra de lo que la sociedad y el poder quiere, por que no respetan las opinión diferentes y si lo haces van a por ti sin piedad. Pero llega un momento en el que hay que mojarse, porque sino el barco se hunde.
No tenéis la sensación, que ahora parece que las mujeres son las que lo hacen todo, las que han creado el mundo, que sin ellas nada funcionaría, que los hombres no han hecho nada en la historia de la humanidad y encima son un lastre para ellas. Todo esto orquestado por unas élites abanderadas de la mujer, que utilizan la polarización máxima de la vida, el género femenino, para ganar votos y dinero y sobretodo a unas niñas de de 15 a 20 años que todavia no tienen claro que es la vida.
En esta época capitalista, de lucha por el poder constante, donde lo que prima es polarizar a la gente al máximo para atraerla a tu opinión, nos damos de bruces con la polarización más peligrosa que hay en la sociedad, la de géneros.
España no es un país de libre opinión. No se puede decir nada en contra de lo que la sociedad y el poder quiere, porque no respetan las opiniones diferentes y si lo haces van a por ti sin piedad. Pero llega un momento en el que hay que mojarse, porque sino el barco se hunde.
No tenéis la sensación, que ahora parece que las mujeres son las que lo hacen todo, las que han creado el mundo, que sin ellas nada funcionaría, que los hombres no han hecho nada en la historia de la humanidad y encima son un lastre para ellas. Todo esto orquestado por unas élites abanderadas de la mujer, que utilizan la polarización máxima de la vida, el género femenino, para ganar votos y dinero y sobre todo a unas niñas de 15 a 20 años que todavía no tienen claro que es la vida.
Tengo la sensación, que en esta manipulación social politizada en la cuestión de géneros, está pasando como cuando el discípulo cree que sabe más que el maestro y quiere quitarle los galones para ser él el maestro. Tengo la sensación, que esta lucha por la igualdad ha sobrepasado ya la igualdad, es una bola de nieve que se ha convertido en alud, alimentada por esas élites con ansias de poder, que utilizan la polarización social como herramienta de manipulación.
Así pues, en un mundo que nos están obligando a posicionarse en A o Z, estaría bien que los que piensan de B a Y empezaran a dar su opinión sin miedo y no dejar a los polarizados A y Z controlar este mundo que es de todos.
Tengo la sensación, que en esta manipulación social politizada en la cuestión de géneros, está pasando como cuando el discípulo cree que sabe más que el maestro y quiere ya quitarle los galones para ser él el maestro. Tengo la sensación, que esta lucha por la igualdad ha sobrepasado ya la igualdad, es una bola de nieve que se ha convertido en alud, alimentada por esas élites con ansias de poder, que utilizan la polarización social como herramienta de manipulación.
Así pues, en un mundo que nos están obligando a posicionarse en A o Z, estaría bien que los que piensan de B a Y empezaran a dar su opinión sin miedo y no dejar a los polarizados A y Z controlar este mundo que es de todos.



